
¿Quieres un consejo?
Reconciliate con tu infancia y date cuenta lo valiosa que fue. Es más, si quieres un consejo de verdad, nunca dejes atrás lo que fue tu infancia y conviertete en un niño otra vez; verás como la vida se torna poco a poco de innumerables colores con los que puedes jugar a perderte en el mundo que se encuentra escondido en la realidad cotidiana: La inocencia.
No podemos volver a ser inocentes, pero al menos podemos ser niños por dentro.
PD: Por favor no mal entender, no hablo de que nos olvidemos de nuestro futuro y responsabilidades, hablo de que nuestra ALMA permanezca como la de un niño; nuestra mente claramente debe madurar.
*Nota del Autor: ¿foto mía?, claro que sí